Rollitos de pizza

Después del tapas&blogs del viernes, ya nada volverá a ser lo mismo. Una gran organización sobre todo, una gran compañía, un lugar espectacular, y un cocinero, Mario Sandoval. ¡Vaya como cocina!. Compartimos mesa con la gente de guía Repsol y con Jorge Guitian, a quien podéis leer aquí -es que el nombre del blog ya es largo, eh!!-. Encantada de conoceos a todos y seguro que repito al próximo. Además del montón de amigos con los que no pude hablar y más al ser mi primera vez. Podéis ver fotos aquí, compartidas por nuestros amigos de tapas&blogs.

Inciso: El que escribe pide poder acudir a este tipo de eventos o vetará la asistencia de la que cocina. He dicho.

Pero como dije al principio ya nada volverá a ser lo mismo y la receta de hoy se queda en una simple pizza enrollada que da hasta penita verla, comparado con el atún rojo que nos puso para cenar, sin duda me quedo con él y con su sabor, o con el bombón dorado de foie y almendra, simplemente delicioso.

Por cierto para los que dudabais de como sabe el oro, pues sabe igual que si chupais una medalla de la virgen de vuestro pueblo, es decir, a nada. Bueno excepto si esta sudada, que sabrá salada.

Para esta receta no vamos a dar ingredientes concretos. Tenemos varias recetas pizzas en pepacooks que nos sirven para la de hoy. Por ejemplo:
· La pizza especiada
· El relleno del calzone
· La coca de higos y jamón
· O incluso la pizza de chocolate, por si queréis sorprender con un postre diferente.

Los pasos, muy fáciles, pero con un par de trucos importantes.
Extendemos la masa de la pizza para que quede muy fina. Realmente fina. Los ingredientes de la masa son la mitad de los que usamos en una pizza normal. Y hazlo sobre un papel de hornear para que sea mucho más fácil el proceso de horneado.

Preparamos la pizza del modo habitual o con tus ingredientes preferidos. Si no te convencen las nuestras, te recomendamos un relleno de setas y ajos tiernos que dice comemé.
Enrollamos la pizza ayudandonos en el proceso del papel sobre el que está la masa, como si estuviéramos preparando sushi.

Cortamos la pizza enrollada en pedazos de unos cuatro centímetros de grosor y los colocamos sobre una fuente de horno. Pon otro papel en el fondo para que la puedas sacar facilmente. Aquí puedes optar por separar cada uno de los trozos con tiras del mismo papel, porque es muy probable que se peguen unos con otros.

Solo queda hornear, con el horno precalentado a 200ºC. El ojo de cada uno es el que dirá cuando está terminada, pero lleva un poco más del tiempo normal de una pizza. La jugosidad entre una pizza normal y el calzone. Y divertida un rato.

Si no recuerdo mal, Jamie Oliver preparo esta receta en uno de sus programa, donde fue a ayudar a los que preparaban el pan para su restaurante una de las mañanas.